300. ¿En qué puedes parecerte a un espartano?

Ve a decirle a los espartanos,
extranjero que pasas por aquí,
que, obedientes a sus leyes,
aquí yacemos.

Leónidas y sus 300 espartanos, esa historia que ha inspirado desde a estoicos como el propio Séneca hasta películas en nuestra era.

En el episodio del podcast de hoy, quería hacer algo especial, al ser ya 300 episodios. Y que mejor analogía que compararnos con los 300 espartanos que murieron defendiendo el paso de las Termópilas del ataque de los persas aún sabiendo que su muerte era segura.

No trata de transmitir que esto es Esparta al estilo no pain no gain, ni un punto de vista de la vida hipermotivado, ni luchar hasta la muerte… no va de ese rollo.

Leónidas y sus hombres obedecían las Leyes de Licurgo, la Ley Espartana. Nosotros debemos de obedecer, nos guste o no, la que llamaba Séneca, Ley de la Naturaleza. Que entre otras cosas, nos recuerda que somos mortales.

Simplemente quería compartir la reflexión de que de esta vida de carne y hueso, no vamos a salir vivos. Igual que tampoco salieron vivos los 300 espartanos ni los otros cientos de griegos que lucharon con ellos.

Se recuerda a los espartanos a pesar de perder la batalla, a pesar de morir todos en ella, ¿Por qué? Porque aunque sabían que la batalla estaba perdida fueron a luchar y dieron lo mejor que tenían… Tanto que casi obran el milagro.

En eso creo que nos parecemos: que nuestra vida es como el Paso de las Termópilas, sabemos que tarde o temprano caeremos… Pues ya que estamos, ¿por qué no lo hacemos lo mejor que podemos?

Pero no quiero transmitir con esto pena o tristeza, ni que sea un lamento, sino más mirar de frente a la realidad tal como es para tomar mejor perspectiva de nuestro día a día y obrar en consecuencia. Que muchas veces se nos olvida.

Y si os apetece una novela chula sobre los espartanos os recomiendo Puertas de Fuego, una historia de ficción dentro del hecho histórico de la Batalla de las Termópilas.