Después de dos años usando las Primal 2 del fabricante americano Lems Shoes, puedo decir que son de las zapatillas «de calle» más cómodas que he tenido hasta la fecha. La anchura en la zona de los dedos es su característica más destacable, lo que la hace muy cómoda para los que tenemos el pie más ancho por naturaleza o por habernos puesto con esto del calzado minimalista cuando salimos a correr o en el día a día. Vamos a verlas a fondo.
Suela
La suela está hecha de una goma patentada por Lems (LemsRubber™) de aire inyectado. Por el nombre no penséis que va amortiguada ni nada por el estilo, lo de aire inyectado debe ser más bien durante su fabricación, para que pese menos, lo que le da a la zapatilla un peso total de 195 gramos.
Por supuesto cero drop. Digo por supuesto porque, salvo alguna excepción, todo el calzado minimalista que analizaré será sin drop, es decir si tacón, por poco que sea. A parte de esto, la suela tiene un grosor de 8mm, con lo que para ser una zapatilla «de calle» está bastante bien. Aunque mirado desde el punto de vista minimalista, y por ponerle algún pero, quizá es un pelín gruesa, pero esto ya es totalmente subjetivo. Habrá quien quiera más protección y habrá quien quiera menos.
A parte de la suela totalmente plana, el pie va bastante protegido, pero lo más destacable de la suela de las Primal 2 es su durabilidad. Como podéis ver en la foto ya se ve algo de desgaste, pero tened en cuenta que llevo dos años con ellas y han sido usadas casi a diario, salvo en verano.
Parte textil
La parte superior es un tejido de microfibra bastante suave con muchas zonas de rejilla para ventilar el pie. Esta suavidad también tiene su lado negativo: hace que cojan guarrería con bastante facilidad y la zona de la puntera es donde empieza a verse algo de desgaste. Si no tenéis críos pequeños que os hacen tiraros por el suelo constantemente no creo que se os desgaste tanto por esa parte, jeje.
Según el fabricante, el material utilizado es 100% vegano. Con lo que no se ha utilizado ningún producto animal en su fabricación.
Interior y comodidad
Vienen con una plantilla finita de 3mm que no molesta para nada. El interior es muy suave y está hecho sin ninguna costura, lo que contribuye a no haber tenido con ellas ningún amago de rozadura. El forro interior está hecho de poliéster que evacúa la humedad.
Como dije antes, a destacar la amplitud en la zona de los dedos, es una pasada. Este espacio en la zona de los dedos lo tienen todos los zapatos de la marca, de hecho también lo tienen registrado como Lems Natural-Shape™ . En la foto de abajo podéis ver la diferencia con un zapato normal.
Comportamiento en distintas situaciones
En el bar tienen un agarre sobre mojado fantástico, totalmente recomendables. En la calle y en el parque también van sin problema. Coñas aparte, al ser un calzado «de calle» no las probado para correr, pero seguramente no habría ningún problema. Sí que las he probado para una marcha de unas 3h por terreno montañoso y mucha piedra (debido a un imprevisto,jeje) y aunque no son para eso respondieron bastante bien, aunque como es lógico al ir por zonas con charcos se calaron, ya que el textil no está preparado para este tipo de situaciones.
Para andar por ciudad o por terreno fácil o pasar todo el día con ellas puestas son una gozada.
Precio
La verdad que para ser unas zapatillas tienen un precio un pelín alto, rondan los 110 – 120 €. Las podéis encontrar en la tienda oficial Lems o en España en Zami.
Conclusión
Si buscas una zapatilla muy cómoda para el día a día y sobre todo ancha en la zona de los dedos ésta es tu zapatilla. El precio es elevado pero la durabilidad que tiene hacen que sea una buena inversión. Si quieres empezar con buen pie en esto del minimalismo, quizá te interese el Curso de Minimalismo Básico, donde aprenderás cómo incorporar el minimalismo poco a poco en tu día a día para fortalecer tus pies de forma segura. También tienes el Curso de Fabricación de Huaraches para aprender a fabricarte tus propias sandalias con suela Vibram (a unos 3€ el par).